El Proyecto Malva de FSC organiza en Madrid el quinto encuentro profesional sobre drogas y perspectiva de género

La sede de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas (PNSD) acogerá el próximo 6 de junio esta jornada, organizada por el Proyecto Malva de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), programa para la incorporación de la perspectiva de género en el ámbito de las drogodependencias. El encuentro, bajo el título “Los cuidados en el centro: género, drogas y reducción de daños”, cuenta con el apoyo del PNSD e invita a profundizar en el necesario cambio de paradigma que implica la incorporación de la perspectiva de género en las estrategias de reducción de daños.

Esta nueva edición de la jornada anual profesional, abordará las estrategias de reducción de daños en el consumo de drogas desde una perspectiva de género. Por ello, se ha querido destacar en el título del encuentro el concepto de “cuidados” desde una mirada feminista que nos acerca a un modelo de relaciones interpersonales, basadas en el apoyo mutuo para atender a las necesidades físicas, psicológicas y emocionales de las personas.

Los objetivos de esta jornada que tendrá lugar en horario de mañana, de 09:00 a 14:00 horas, son continuar la reflexión en torno a la incorporación de la perspectiva de género en el trabajo con drogas en el ámbito profesional, compartir buenas prácticas y, sobre todo, seguir potenciando el proceso de trabajo en red y puesta en común entre profesionales de los diferentes proyectos y servicios del ámbito.

El encuentro será inaugurado por Azucena Martí Palacios, delegada del Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social; así como por Ruth Olmos Espinosa, jefa del Departamento de Asistencia de la Subdirección General de Adicciones de Madrid Salud y por Marta Álvarez Freijo, directora del Área de Adicciones, Género y Familia de la Fundación Salud y Comunidad.

Cabe señalar que la conferencia inaugural, titulada “El 20%, el género ignorado en las estrategias de reducción de daños”, correrá a cargo de Mercè Meroño Salvador, psicóloga especialista en salud pública y perspectiva de género y coordinadora de programas y estudios de la Fundación Àmbit Prevenció que nos ofrecerá una revisión de las distintas estrategias del ámbito. Esta conferencia será moderada por Otger Amatller Gutiérrez, coordinador de Prevención de FSC.

A destacar también la mesa redonda titulada “Incorporando la perspectiva de género en la reducción de daños”, moderada por Ivet Oriols Vadell, coordinadora del Proyecto Malva de nuestra entidad, en la que intervendrán, entre otros profesionales, nuestra compañera Belén Sánchez Garcés, directora del Centro de Intervención de Baja Exigencia (CIBE) de Castellón, gestionado y dirigido por FSC.

Finalmente, tendrá lugar la presentación de la campaña “Abordemos las drogas con gafas violeta” del Proyecto Malva. Esta campaña ha sido impulsada desde este programa, contando para ello con el apoyo del PNSD, a través de un vídeo divulgativo dirigido a profesionales que aporta claves para la incorporación la perspectiva de género en el ámbito de drogas. Por otra parte, se ha elaborado una infografía resumen con las ideas clave del vídeo, para que los y las profesionales puedan utilizarla como herramienta de trabajo en su desempeño profesional.

Cabe señalar que la entrada a la jornada es gratuita, si bien las plazas son limitadas. Para asistir es necesaria la inscripción previa, a través de este enlace:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSfhRIHX9CfnknGyzwmyXucD72LapRu8BKbJmM9fsDIjKRxXKA/viewform


El IASS pone en marcha un protocolo-guía para garantizar la escucha y participación de niños, niñas y adolescentes

El Gobierno de Aragón, a través del Servicio de Atención a la Infancia y Adolescencia del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), ha realizado un protocolo-guía para garantizar la escucha y participación de niños, niñas y adolescentes para su aplicación prioritaria en la comunidad. Su finalidad es que la opinión de los y las menores sea tenida en cuenta en todos los asuntos que les afectan, en los procedimientos técnicos del Sistema de Atención a la Infancia y Adolescencia en Aragón.

En la elaboración de este protocolo, ha participado un grupo matriz integrado por 13 personas de diferentes instituciones y en el Grupo de Validación, entre otros profesionales del ámbito de menores, nuestro compañero Daniel Urbina, director del Centro de Acogida de Menores (CAM) de Ateca, en Zaragoza, dirigido y gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC).

A través de este documento, que ya ha sido presentado públicamente al ámbito profesional, se pretende garantizar el derecho de los y las menores a ser escuchados/as y a participar activamente, a lo largo de su proceso de protección y lograr que su escucha y participación sean un objetivo común en todas las entidades y profesionales que intervienen en el sistema de atención público. Cabe señalar, en este sentido, que el protocolo ya ha sido adaptado e incluido desde hace algunos meses en el funcionamiento del CAM de Ateca, destacándose los buenos resultados alcanzados hasta el momento, según afirma Daniel Urbina.

El protocolo contempla los siguientes contenidos y aspectos: una introducción; definiciones de escucha y participación; ámbito de aplicación; objetivos; la escucha y participación en el proceso de protección (cuándo y cómo), así como bibliografía relacionada y anexos. De especial interés es, además, el prólogo del documento, escrito por Joaquín Santos, director Gerente del IASS, en el que señala que, en estos años de trabajo, se han realizado significativos avances desde la administración, en la línea de la propuesta que ofrece este documento.

Entre estos avances, destaca la intención de facilitar el establecimiento de dinámicas profesionales de colaboración y coordinación desde los servicios públicos, dado que son potenciadores de la iniciativa personal y de la incorporación de nuevos elementos culturales, en este caso, en la escucha de los y las menores en sus procesos de intervención.

En este sentido, señala que ello es de vital importancia, ya que los niños y las niñas, principales destinatarios de las diferentes actuaciones, no deben ser considerados como sujetos pasivos. De acuerdo con sus propias palabras, pueden no tener la mayoría de edad y estar sometidos al criterio de los adultos a su cargo, pero esto no quiere decir que no sean sujetos de derechos ni capacidad personal para exponer sus necesidades y la perspectiva, desde la que comienzan a ver su propia vida.

Por otra parte, adentrándonos en el documento, señalar, en cuanto a la escucha y participación en el proceso de protección, que, según se detalla, al comienzo de la intervención (en el momento en que se considere más adecuado) se informará a los y las menores de sus derechos y especialmente, de la posibilidad de participar dando su opinión, y que ésta será en cuenta. Además, si tras la valoración profesional se decide algo diferente, se les justificará la decisión tomada.

En todos estos casos, se dará la opción a los y las menores de plasmar su opinión directamente por escrito, o a través de un representante o profesional especializado. Se valorará por el equipo la misma, teniendo en cuenta dicha opinión, siempre que redunde en el interés superior del/de la menor.

Igualmente, tras informarle de sus derechos y comprobar que los ha entendido, se tendrá en cuenta su apreciación acerca de la gravedad y urgencia de la desprotección. Para ello, será necesario recoger su opinión sobre la situación familiar y necesidades propias, su valoración de las posibles causas y necesidades, así como propuestas de resolución.

Por otra parte, se adaptará el modo de recoger esta participación a su edad, capacidades cognitivas, aptitud y actitud, así como al nivel de comunicación, en el caso de que sean extranjeros/as o tengan diversidad funcional. Tras la valoración inicial junto a los y las menores, se planificará la intervención prevista, recogiendo sus propuestas, sugerencias y posibles quejas.

Además, de acuerdo con el protocolo, durante el tiempo de acogimiento, participarán en el modelo de comunicación y tipo de relación con los diferentes profesionales, así como en el rediseño y funcionamiento de los recursos, y propondrán mejoras y nuevos servicios, adaptados a las necesidades.

Cabe señalar también, en cuanto al cómo del proceso de escucha y participación, la necesidad de crear las condiciones que garanticen la confidencialidad, realizando la comunicación con los y las menores en un lugar en el que se sientan seguros/as, evitando elementos distractores e interrupciones; siempre que sea posible. La entrevista además se debe establecer sin la presencia de padres o adultos que puedan tener algún conflicto de intereses, además de favorecer que se haga todo el proceso en el idioma de los y las menores.

Por otra parte, se deben evitar presiones de cualquier tipo que puedan ejercer su derecho con libertad y crear un entorno amigable, al igual que registrar cuidadosamente y de manera fiable la opinión de los y las menores, evitando preguntas o actitudes sugestivas; reducir al mínimo el número de profesionales con los que tiene que relacionarse, etc.

Otro dato de interés es la ficha de recogida de información que aporta este protocolo. Tal y como se señala en el mismo, de forma genérica en todos los informes que emitan los equipos técnicos, deberá constar la opinión de los y las menores, así como una fundamentación sobre el grado de coincidencia con la decisión que se adopte o con la propuesta que se realiza, de acuerdo con esta ficha de recogida de opinión, ofrecida en un anexo.

También se aporta un decálogo de participación y escucha para niños, niñas y adolescentes, en consonancia con las recomendaciones de la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, que pueda servir como instrumento de trabajo a los y las profesionales del ámbito.

Desde la Fundación Salud y Comunidad valoramos positivamente este protocolo de escucha como guía eficaz que da valor a la participación de los y las menores, y, especialmente, la colaboración de nuestro compañero Daniel Urbina en el Grupo de Validación, a través de sus preciadas aportaciones.


"El hecho de venir a trabajar a diario feliz y sin que me cueste esfuerzo, es la mejor sensación que se puede tener trabajando con mayores"

Isabel Ortega es la responsable del Área Psicosocial de la Residencia y Centro de Día “Las Fuentes” de Zaragoza, de titularidad del IASS, que dirige y gestiona la Fundación Salud y Comunidad (FSC). Cuenta con el Grado de Trabajo Social y con un Máster en Gerontología Social. Año tras año, ha ido ampliando conocimientos de especialización en tercera edad y en otros ámbitos, con el ánimo de hacer cada día mejor su trabajo. En esta entrevista, que coincide con la celebración del 22 aniversario del centro, hemos querido conocer un poco más a esta profesional que sus compañeros/as describen como muy vital y comprometida en su labor diaria.

- ¿Qué te llevó a dedicarte a la profesión de trabajadora social?, ¿la elegiste o te eligió ella a ti?

Rotundamente, “me eligió ella a mí”. Desde bien pequeña, e incluso en la adolescencia, quería ser veterinaria, dada mi gran pasión por los animales. Cuando terminé Bachillerato, un “avisador interno” hizo que ojease aquellas carreras “más de letras o sociales”, si bien yo estaba cursando Bachillerato de Ciencias de la Salud y… aquí estamos.

- ¿Cómo fueron tus inicios en la Fundación Salud y Comunidad y en el servicio en concreto?, ¿por qué el ámbito de los mayores y no otro?

Recuerdo que estaba trabajando en una residencia privada en la que ya llevaba cerca de dos años y me enteré de que en la Residencia y Centro de Día “Las Fuentes”, estaban buscando a una persona para el puesto de trabajadora social. Carolina, antigua psicóloga del centro, me entrevistó y, por lo visto, le debí gustar…

Empecé a trabajar en octubre de 2008 y años más tarde, me hice cargo de la coordinación del Área Psicosocial. Parece que fue ayer, pero ya llevo en esta “segunda casa” casi 11 años.

- 11 años que parece que han pasado rápido. ¿Qué tipo de tareas desempeñas en el centro y con cuáles disfrutas más?

De todas las funciones que realizo que son muy variadas (acogida, planificación, orientación de recursos, intervención, coordinación…), me gusta mucho implicarme en la acogida de nuevos usuarios/as y sus familias. A todos nos cuesta dar un primer paso que implique un cambio de sentido y, si a ello le sumamos las “fantasías y miedos” con los que cargamos, me parece especialmente importante esta primera toma de contacto.

Me encanta conocer a las personas a través de su historia de vida, y me gusta transmitir total confianza al usuario/a y a la familia, dado que, a partir de ese instante en el que entran al despacho, esas paredes, esos pasillos, esas salas, todos los que trabajamos… vamos a formar parte de su día a día.

También reconozco, aunque suene algo atípico, que disfruto con las actividades “más administrativas” y/o de coordinación. Quizá en eso tiene que ver “mi lado perfeccionista”, pero me encanta ver que todo encaja, que sale bien. En todo ello juega un gran papel el gran equipo de compañeros/as que tengo. Trabajar con ellos/as es muy gratificante, tanto a nivel personal como laboral.

- ¿Qué momento o momentos recuerdas como el mejor o mejores en el trabajo que desempeñas en este servicio?

La verdad es que existen momentos más reconfortantes que otros (sobre todo, a nivel emocional con usuarios/as y familias) pero sí soy sincera, el hecho de venir a trabajar a diario feliz y sin que me cueste esfuerzo, es la mejor sensación que se puede tener trabajando con personas mayores.

- ¿Y qué momento o momentos dirías que son los más delicados?

Cuando interfieren sentimientos y emociones, si bien de esos momentos más delicados he aprendido lecciones de vida que siempre llevaré conmigo.

- ¿Qué actividades novedosas habéis introducido durante los últimos años en el Área Psicosocial?

Cuando hablo del área se me pone una sonrisa que hay que ver, porque desde siempre, en este servicio, hemos formado un equipo con aire fresco, con propuestas y dinamismo. Desde hace ya muchos años, comenzamos con actividades de musicoterapia, con perros, de carácter intergeneracional.

Desde hace dos años, llevamos a cabo actividades de reciclaje implicando a usuarios/as y familias del centro de día. Nos encanta que los familiares participen en nuestras ya famosas barbacoas. En general, nos gusta innovar con acciones y actuaciones originales (zumba, bollywood, humor…), en las que usuarios/as y familias se sientan activos, con vitalidad.

- ¿Es necesario un envejecimiento activo?, ¿por qué?

Sí, lo es. Con ello, se trata de optimizar todas las oportunidades de bienestar físico, social y mental con el principal objetivo de tener calidad de vida en la vejez. Como profesionales, debemos fomentar este envejeciemitno activo, así como transmitir y contagiar esas ganas de vivir, y reivindicar que ser mayor o tener una demencia, no es sinónimo de reclutamiento o de soledad. Podemos hacer tantas cosas como queramos, en función de los límites que nos marquemos. Justamente por ello, nos encanta organizar actividades novedosas.

- Además, recientemente habéis celebrado el 22 aniversario del servicio con una gran fiesta a la que asistieron diferentes representantes públicos y de nuestra entidad. ¿Qué destacarías de ello y qué logros crees que se han conseguido en este tiempo?

Sí, el 16 de mayo celebramos 22 años, y, ¡cómo no!, lo pasamos “pipa”. Fue un día de muchas actividades, disfraces y alegría.

Dicho esto, somos conscientes de que cada vez nuestros usuarios/as son más dependientes, pero por ello, debemos hacer más, y en ello estamos, para que nos regalen una sonrisa, un abrazo... En todo ello, la familia tiene un gran valor y sin ella, la calidez no estaría tan latente.

En los años que llevo trabajando, si algo he de destacar es el gran equipo de trabajo que conformamos, la gran capacidad de resiliencia y de adaptarnos a los cambios.

Además, las mejoras en la formación; el hecho de potenciar las destrezas emocionales y de echar mano a “nuestro botiquín de ideas”, es algo muy positivo que podemos aplicar en nuestro día a día.

- ¿Te gustaría aprovechar esta entrevista para hacer algún otro comentario?

Sí. Agradecer a todos mis compañeros/as, porque me siento muy afortunada de tenerlos, y sin cada uno/a de ellos/as no sería posible cada pequeño éxito, cada pequeña celebración y cada día a día.

También a mi GRAN MAESTRA, a Carmen Lorente, directora del servicio, porque, gracias a ella, he aprendido muchísimo a nivel laboral, personal y, sobre todo, a realizar el trabajo desde la sinceridad, transparencia y lealtad.


La sociedad civil como agente activo para articular la inclusión social

Recientemente se han celebrado en Albacete las III Jornadas de Servicios Sociales e Inclusión, en relación con el diseño de políticas de inclusión social, sostenibles y resilientes y nuevas realidades sociales y modelos de desarrollo, en las que nos ha representado nuestra compañera Sonia Fuertes, subdirectora del Área de Inclusión Social y Reducción de Daños en Drogodependencias de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), con una destacada ponencia, de la cual reflejamos los aspectos fundamentales.

Durante su intervención en estas jornadas organizadas por la Federación de Municipios y Provincias Castilla La-Mancha, señalaba que la sociedad civil y, por consiguiente, el tercer sector social, desempeñan un papel fundamental en la articulación de la inclusión social como agentes activos. Además, al hilo de las nociones de sociedad civil, de agente y de inclusión a las que se refería detenidamente, explicaba algunos retos que se nos plantean como sociedad civil.

Estos retos, según sus propias palabras, guardan relación con lo que podríamos llamar una repolitización de la acción social y necesariamente, nos remiten a la incidencia pública y política, resultando necesario reivindicar una nueva manera de hacer política que vele por fortalecer la capacidad democrática de nuestras organizaciones y que se concrete en políticas que sitúen a la ciudadanía en el centro de sus propuestas.

“El tercer sector social puede y debe contribuir a impulsar políticas predistributivas y redistributivas que generen cambios reales y transformadores. La incidencia política, que forma parte de nuestra actividad de manera habitual, debe profesionalizarse y trabajar en diversos frentes: en el marco conceptual (reivindicando las políticas sociales como inversión y situándolas en la esfera de los derechos tan reconocidos como los que competen a la sanidad o la educación), en el marco del conocimiento y del diseño de propuestas concretas (mediante informes, definición de actuaciones, establecimiento de objetivos y hojas de ruta, asignación de recursos) y en la evaluación”, afirmaba Sonia Fuertes.

También, en palabras de la subdirectora del Área de Inclusión Social y Reducción de Daños en Drogodependencias de FSC, se hace “necesario blindar el gobierno de las organizaciones de acción social (y muy especialmente de las federaciones y organizaciones de tercer nivel) de tentaciones de cooptación partidista, garantizando su independencia y su alineación con la defensa de más y mejores políticas sociales”.

Tal y como señalaba, es indiscutible que el tercer sector social actúa y que estas actuaciones han ido ganando cada vez mayor incidencia y han conseguido impulsar cambios, si bien un debate del todo ineludible es la consideración del tercer sector como agente social. “Este es uno de los retos. Y aquí, conviene acción negociadora y también estrategia. La participación en espacios para el diálogo civil (y la propuesta de creación de los mismos en aquellos lugares donde no se hayan constituido) es clave, pero la propia redefinición de agente social”.

Por otra parte, un segundo reto que planteaba Sonia Fuertes es la relación del tercer sector social con los otros agentes sociales, buscando aquellos elementos de confluencia donde se puedan establecer alianza, dirimiendo las diferencias con generosidad y firmeza. Constituirse como un agente que articula, con flexibilidad. Algo que no siempre ha resultado fácil en el ámbito del tercer sector.

Y para finalizar, se refería ampliamente al concepto de inclusión social. “Los retos son numerosos y resulta difícil posiblemente listarlos todos, pero posiblemente podemos apuntar aquellos que tienen un mayor impacto. En primer lugar, combinar la reivindicación de la acción social local, próxima, con la búsqueda de un cambio de modelo de carácter global. En ese sentido, ser capaces de ofrecer una mirada que recoja la complejidad y permita analizar las distintas realidades con las que convivimos”.

Y “aterrizar estas propuestas y situarlas en lo concreto, estableciendo también prioridades. El énfasis en políticas redistributivas y predistributivas significa combatir aquellas situaciones que originan la desigualdad, con especial atención a la educación y otros mecanismos de promoción social. Pero también con medidas fiscales más justas”.

En este sentido, Sonia Fuertes se refería a la garantía de ingresos, ocupación y vivienda como temas urgentes.  “Nuestra opinión sobre la renta básica, la supuesta aceptación de la precariedad en algunos circuitos de inserción, las políticas de soporte a las familias (en plural también en cuanto a su composición), la limitación del precio del alquiler… Ser capaces de pensar distinto y también de innovar en nuestras prácticas, otro de los retos ya para concluir”.

Tal y como concluía en su intervención la subdirectora del Área de Inclusión Social y Reducción de Daños en Drogodependencias de FSC, por todos los motivos alegados, la sociedad civil debe ser considerada como agente activo en la articulación de la inclusión social y, como sociedad, fracasamos en la medida en la que no podamos ofrecer mecanismos que garanticen la igualdad de oportunidades para todas las personas.

Cabe destacar que las III Jornadas de Servicios Sociales e Inclusión reunieron a más de 250 expertos/as nacionales, regionales y locales del Sistema de Servicios Sociales que que, a lo largo de dos intensas jornadas, analizaron y debatieron sobre el presente y el futuro de las políticas de inclusión social, tanto en Europa, como en Castilla- La Mancha.


Construyendo nuevas masculinidades. El abordaje de la violencia en la Unidad Dependiente de Alta Intensidad Barcino

No existe una única forma de ser hombre. Partiendo de esta premisa, abordamos la masculinidad desde la Unidad Dependiente de Alta Intensidad, con el objetivo de poder repensar y replantear la idea de masculinidad y los roles de género adquiridos. Esta unidad, de titularidad del Departamento de Justicia de la Generalitat de Cataluña, está gestionada y dirigida por la Fundación Salud y Comunidad (FSC).

Nuestro programa de intervención en ella, va dirigido a personas que se encuentran en tercer grado penitenciario y que han cometido delitos violentos, muy relacionados parte de ellos, con el modelo socializador de la masculinidad tradicional. Por ello, resulta necesario realizar un abordaje específico sobre “qué es ser hombre”, rompiendo estereotipos, prescindiendo de la violencia y fomentando la empatía y el cuidado con uno mismo.

La UD Barcino abrió sus puertas en agosto de 2018 y es la primera Unidad Dependiente de Alta Intensidad en Cataluña que ofrece un acompañamiento profesional especializado en el área de la violencia, el tratamiento de las adicciones y la inserción sociolaboral, a personas que tienen un riesgo de reincidencia medio/alto, con problemática toxicológica y que, por su historia de vida, han hecho uso de la violencia como algo identitario y una forma de relacionarse ante el otro desde la figura del poder.

Estas características hacen que esas personas queden fuera de otros programas y que, por tanto, no puedan recibir un soporte profesional en este momento de transición, derivando en muchos de los casos, en la comisión de un nuevo delito y en una nueva entrada en prisión.

El uso de la violencia ha estado y está muy presente en las personas a las que atendemos, no solo porque la hayan sufrido o ejercido hacia los demás, sino también por la que ejercen contra ellos mismos, a través del consumo de tóxicos o boicoteándose su propio proceso, como formas de violencia auto dirigidas de las que no son conscientes, y que son necesarias abordar y analizar para lograr entender, cómo la violencia ha estado presente en sus vidas y les ha llevado a su situación actual.

Semanalmente llevamos a cabo un espacio grupal para abordar la masculinidad y la violencia con el objetivo de romper clichés y falsas creencias sobre qué es “ser todo un hombre”. A través de este espacio, profundizamos sobre la historia personal de los participantes, sobre la sexualidad, o las relaciones familiares y de pareja, muy ligadas a episodios de violencia y a su concepción de la virilidad.

Este espacio se inició en septiembre de 2018 y la acogida por parte de los participantes está siendo muy buena. A pesar de las primeras resistencias que surgieron al cuestionarse el concepto de masculinidad y virilidad, poco a poco van interiorizando que hay nuevas formas de entender la masculinidad y se han ido desmontando falsas creencias, abordándose tabús sociales. En general, las personas que participan en este espacio se muestran participativas, colaboradoras y hacen una valoración positiva del trabajo que llevan realizando en el mismo.

Desde la Unidad Dependiente de Alta Intensidad Barcino, trabajamos para que este espacio de reflexión sirva como motor que genere cambios en las personas a las que atendemos, y que éstas logren romper con la idea tradicional de masculinidad y con los roles sociales y sexuales que se les presuponen por el hecho de ser hombres, rechazando la idea de masculinidad única y universal y promoviendo una construcción de la masculinidad que no esté basada en las relaciones de poder.


La oportunidad europea

Este mes de mayo, Europa es protagonista de diversos eventos. Por una parte, el pasado 9 de mayo celebramos el Día de Europa y en diferentes ciudades europeas se sucedieron actividades de diverso signo, algunas más reivindicativas, otras de naturaleza más lúdica y/o cultural.

Ahora bien, más allá de estos eventos, el origen de esta festividad no es tan conocido como creemos debiera. El hecho que motiva esta celebración es la conocida Declaración de Schuman de 1950. En el marco posterior a la segunda guerra mundial, este ministro francés de Asuntos Exteriores impulsó la denominada Comunidad Europea del acero y del carbón (CECA) que permitía una administración conjunta y que, por tanto, dificultaba la posibilidad de iniciar un conflicto bélico entre los países que se sumaran a la iniciativa. Recordemos que tanto el acero como el carbón eran claves para la producción de armamento.

La CECA dio origen a lo que después fue la Europa de los seis y que con el tiempo constituiría el inicio de la Comunidad Europea y en 1993 de la Unión Europea.

De aquel nacimiento que conmemoramos año tras año podemos extraer algunas conclusiones que guardan relación con su génesis: la necesidad de impulsar un mercado común y también de preservar Europa de guerras entre los estados miembros, avanzando hacia la gobernanza multinivel. Dos fuerzas que siguen recorriendo la política europea y que no necesariamente convergen.

Es evidente que los diversos países compartimos el deseo de una Europa en paz, pero probablemente no todos lo entendemos de la misma manera o, más preciso aún, para algunas personas Europa debiera ser un ejemplo de sociedades con mayor capacidad equitativa e inclusiva. Con justicia social.

En esta línea, señalamos la otra gran cita de este mes: la convocatoria de elecciones al Parlamento europeo del próximo 26 de mayo. Unos comicios que nos llegan en un momento donde algunos partidos cuestionan la vinculación a la Unión Europea (movimientos eurófobos que plantean directamente la secesión y aluden al Brexit como ejemplo a seguir) y otros pretenden rebajar la soberanía que debiera cederse al espacio común (euroescépticos), reduciéndola a un espacio económico y comercial común sin mayores implicaciones de naturaleza legislativa o política.

Es en este debate donde afortunadamente encontramos también otras posiciones más esperanzadas con la construcción colectiva europea, el tercer sector social también ha hecho oír su voz. Desde las diversas organizaciones se han realizado debates y se han mantenido reuniones bilaterales con distintos eurodiputados para dar a conocer las propuestas del ámbito social.

Destacaremos las que al respecto ha realizado EAPN España, la red de lucha contra la pobreza en la que la Mesa del Tercer Sector colabora activamente. Cabe señalar que ECAS (Entidades Catalanas de Acción Social), de la cual forma parte la Fundación Salud y Comunidad (FSC), es miembro de esta mesa.

  1. Aprobar una directiva que ponga fin a la discriminación de género de las mujeres.
  2. Pacto contra la Pobreza y la Exclusión para reducir las desigualdades por medio de políticas macroeconómicas y fiscales.
  3. Pilar Europeo de Derechos Sociales: promover directivas que garanticen los derechos del trabajo y de protección laboral y social.
  4. Rentas Mínimas Adecuadas: ratificar una Directiva sobre Rentas Mínimas que garantice una vida digna.
  5. Salario Mínimo Europeo: situar a las personas trabajadoras por encima del umbral de pobreza para combatir la precariedad laboral.
  6. Fondo Europeo contra el abandono Escolar temprano y el desempleo juvenil.
  7. Prestación por hijo/a a cargo: Directiva sobre esta prestación y contra la pobreza infantil.
  8. Asilo y Migración: ratificar una Directiva sobre Asilo y Migración que proteja los Derechos Humanos.
  9. Pacto de Estabilidad y Crecimiento: blindar financieramente los pilares del Estado de Bienestar (Sanidad, Educación, Servicios Sociales, Vivienda Social y Pensiones).
  10. Diálogo Social: incorporar a representantes de ONG como agentes sociales de pleno derecho.

En definitiva, avanzar hacia una consecución real de los principios que se establecen en el Pilar Europeo de Derechos Sociales que debieran tener un componente vinculante y una hoja de ruta clara. La Europa a la que aspiramos, la Europa Social, ha de poder concretar sus políticas para, parafraseando a Juncker, no quedar reducido a un poema. Hermoso como sueño, evanescente en su materialidad.


Sonia Fuertes
Subdirectora del Área de Inclusión Social y Reducción de Daños en Drogodependencias de la Fundación Salud y Comunidad


Mejoras en el servicio de consigna del CAI de Alicante: digitalizar procesos - humanizar relaciones

El Centro de Acogida para Personas Sin Hogar (CAI) de Alicante, de titularidad municipal, gestionado y dirigido por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), cuenta, desde hace más de quince años, con un servicio de consigna para las personas sin hogar.

Este servicio, abierto tanto a residentes como a no residentes, permite en la actualidad la custodia de hasta tres enseres por persona (bolsas, mochilas, maletas, etc. con un máximo de 20 kilos por bulto). El tiempo de custodia es indefinido, si bien existe la obligatoriedad de acudir para renovar. La periodicidad de la renovación es mensual para las personas residentes y semanal para el resto. Este es el único servicio de consigna dirigido a la población en situación de exclusión de la ciudad de Alicante que abre los 365 días del año, tanto al inicio de la mañana como al final de la tarde.

En los últimos años hemos venido constatando un incremento notable en el uso de este servicio. En 2018 fueron más de 800 las personas distintas que lo utilizaron de forma puntual o continuada a lo largo del año. Su gestión requiere, buena parte del horario en el que está abierto, la dedicación de dos profesionales.

Conscientes de la importancia de dar un servicio de calidad, a mediados del año pasado comenzamos con el proceso de informatización. La gestión hasta entonces estaba basada en un engorroso sistema de vales con papel de calco y registros manuales. Podemos decir en sentido literal y figurado que este proceso de renovación ha supuesto pasar del (papel) carbón a la era digital. Lo que antes eran vales manuscritos son ahora fichas impresas que incorporan un código de barras.

El proceso no ha sido simple, en el desarrollo del mismo se ha contado con el apoyo del Departamento de Informática de la Fundación Salud y Comunidad en la selección y preparación del equipamiento informático y con la buena predisposición del Ayuntamiento de Alicante a hacerse cargo de los consumibles necesarios.

Ha sido necesario, además, el replanteamiento de la operativa de gestión; la creación desde el CAI de una aplicación informática específica adaptada a las necesidades concretas del servicio; la adquisición de una impresora adecuada; la formación del equipo profesional; el diseño de un plan de transición de uno a otro sistema que evitara el cierre del servicio; la resolución de diversas incidencias; la previsión de un sistema de copias de seguridad, la evaluación de los resultados...

Tras algunos meses de funcionamiento, constatamos que las mejoras han sido notables en diversos aspectos: al disminuir la carga burocrática, los tiempos de espera para ser atendidos se han reducido notablemente; la posibilidad de obtener diversos listados nos está permitiendo depurar errores que antes eran indetectables; existe ahora una estadística actualizada en tiempo real (a fecha de hoy, hay 349 bultos pertenecientes a 174 personas distintas); hay también un sistema de alarmas para detectar fácilmente aquellos enseres pasados de fecha y una gestión adecuada de situaciones excepcionales...  mejoras técnicas que se traducen en una mayor satisfacción de las personas atendidas y del equipo que las atiende.

Este cambio se inscribe dentro del objetivo estratégico de FSC de “adecuar de forma continuada los espacios y otros recursos materiales del centro valorando su idoneidad”. Informatizar determinados procesos no responde a una pasión por la tecnología. El logro no es haber pasado de mirar los papeles a mirar la pantalla de un ordenador, el auténtico avance es tener tiempo, sosiego y medios para poder poner la mirada en la persona. Esta es nuestra pasión más auténtica.


Fidel Romero Salord
Director de Centro de Acogida e Inserción para Personas Sin Hogar de Alicante, gestionado por la Fundación Salud y Comunidad.


Acercándonos a las nuevas tecnologías en el Centro de Acogida de Menores de Altea

La gestión del ocio y del tiempo libre en este servicio de titularidad de la Generalitat Valenciana, dirigido y gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), y el buen uso que los y las menores hagan de él, es uno de los mayores desafíos que se le plantea a todo el equipo educativo del centro. 

La inversión productiva de este tiempo puede jugar un papel determinante en aspectos como la intervención o integración social en los y las adolescentes. De modo que se trabaja arduamente por poner a su disposición una serie de actividades, talleres o dinámicas, en las cuales aprendan nuevos conceptos, refuercen sus carencias y donde el aprovechamiento del tiempo sea el eje central de su vida lúdica.

Con demasiada frecuencia, ellos/as emplean este tiempo en realizar actividades que no se relacionan con ámbitos artísticos, intelectuales o propios del ser humano.  Es por ello por lo que, desde el servicio, trabajamos con el fin de crear una red social, laboral y de comunicación con el entorno próximo de la que se puedan beneficiar los menores, para que puedan estar en contacto con todo aquello que se les puede ofrecer, sumando momentos, enriqueciéndose y creciendo juntos.

En nuestro empeño en establecer una red de contactos, y apoyarnos en todos aquellos servicios de nuestra zona que deseen colaborar con nosotros de manera altruista, es como surge el acuerdo entre el establecimiento MediaMarkt Finestrat, en la provincia de Alicante, y el Centro de Acogida de Menores de Altea.   De forma que, estableciendo reuniones con su equipo directivo y presentándoles esta necesidad anteriormente mencionada, es como florece la oportunidad de asistir mensualmente a formaciones impartidas por el propio personal de la empresa, de las que se benefician los menores.

Se produce así la ocasión de que ellos/as puedan desarrollar conocimientos relacionados con el ámbito tecnológico, acercando en algunos casos y manteniéndoles actualizados en otros, respecto a las novedades de las nuevas tecnologías de la información y comunicación.

Contando con el buen hacer de todo el personal de este establecimiento, se han establecido las siguientes formaciones, en las que se abordan contenidos de interés para los y las adolescentes:

  • Construye y programa un instrumento musical: 13 y 14 de mayo.
  • Prueba la movilidad eléctrica:10 y 11 de junio.
  • Iníciate en el mundo DJ: 15 y 16 de julio.
  • Haz fotografías con tu Smartphone:12 y 13 de agosto.
  • Torneo de Playstation: 16 y 17 de septiembre.
  • Crea tus películas con MAC: 14 y 15 de octubre.

Cabe señalar que ya se ha realizado una primera sesión sobre iniciación a la fotografía y una segunda sobre el uso del iPhone, con muy buena acogida entre los menores, lo cual nos produce mucha satisfacción.

Por todo ello, queremos agradecer la inversión del tiempo y dedicación a todo el equipo de este establecimiento dedicado a la venta de electrodomésticos, informática y electrónica de consumo, y a todas las personas que se esfuerzan para que los y las menores continúen aprendiendo cada día.


La Comunidad Terapéutica “Can Coll” de FSC dedica Sant Jordi a la creación literaria entre rosas y libros

Gestionar el tiempo libre y de ocio de forma constructiva resulta puntal cuando nuestro mundo ha girado en torno a una sustancia, conducta o persona. Se pueden cubrir estas franjas horarias, para no volver a los pensamientos y hábitos negativos del pasado, si bien generalmente acontece una tarea dificultosa en los procesos de deshabituación a las drogas. 

Para romper la inercia instaurada, cabe generar un cambio que pase por aprender a planificar nuestro tiempo libre, abriéndonos a un abanico de nuevas actividades que nos permitan mantenernos ocupados, a la vez que nos generen bienestar personal.

Las diferentes festividades anuales, así como las fechas señaladas (cumpleaños, celebraciones, etc.), pueden suponer una situación de riesgo para la persona que está fortaleciendo su abstinencia. Por este motivo, resulta imprescindible protegerse, renunciando a la forma en que celebrábamos estas fiestas anteriormente y buscando nuevas maneras saludables de disfrutarlas, sin necesidad de recurrir a las drogas, reforzando así nuestra abstinencia.

El patrimonio histórico y cultural que compartimos, en buena parte reflejado en las festividades locales y nacionales, nos permite entendernos mejor como personas y como sociedad. En este sentido, es significativa la importancia que tiene para una persona poderse reconocer como parte de una zona determinada (hecho que no implica perder lazos con otras localidades) y participar de sus costumbres.

Como cada 23 de abril, con motivo de la Diada de Sant Jordi, las calles de Cataluña se tiñeron del rojo de las rosas y se llenaron de paradas de libros y riadas de gente paseando. En la Comunidad Terapéutica “Can Coll” de la Fundación Salud y Comunidad (FSC) nos sumamos a la celebración organizando una serie de propuestas culturales en torno a esta festividad, en la que no faltaron rosas y libros.

En primer lugar, obsequiamos a todas las usuarias del servicio con una rosa roja, símbolo de reconocimiento y de amor. Además, teniendo presente que el 23 de abril también coincide con el Día del Libro y de los Derechos de Autor, organizamos un concurso literario, en el cual se animó a participar a todo el mundo. Consistía en redactar poesías, relatos y cuentos de temática libre y de forma individual.

Destinamos buena parte de la mañana a la elaboración de los escritos y una vez acabados, viendo la implicación y el tiempo dedicado, organizamos, ya durante la tarde, un recital literario. En ambas actividades hubo una gran participación, motivada por la oportunidad de poder exponer cada una de las creaciones y poder escuchar las del resto.

Una vez leídos los escritos, procedimos a realizar las votaciones que, cabe señalar, estuvieron muy reñidas. A los autores de los 6 relatos ganadores les obsequiamos con una medalla dedicada y un libro que escogieron ellos mismos. También, entregamos un libro como regalo grupal, que ha quedado a disposición de todos en la biblioteca del servicio. Finalmente, decidimos exponer el conjunto de escritos decorando con ellos espacios públicos del centro.

La iniciativa de organizar y llevar a cabo actividades culturales en un día tan señalado como es la festividad de Sant Jordi, contribuye a que aprendamos a vivir las festividades de forma constructiva y nos permite aproximarnos a las tradiciones literarias, favoreciendo nuestro crecimiento personal y artístico. Las valoraciones por parte del grupo fueron muy positivas, así que esperamos seguir celebrando los próximos festivos con la misma ilusión, buscando instaurar el cambio para poder disfrutar de las fechas señaladas de forma sana y plena.


"La colla de Nelson", un cuento para trabajar la aceptación y el respeto hacia la diversidad con menores

En esta ocasión, os queremos acercar la génesis del cuento "La colla de Nelson" (“La pandilla de Nelson”) hasta su publicación, de nuestro compañero José Figueres, integrador social del centro de acogida a menores “Verdader 2”, servicio de atención residencial de titularidad pública, gestionado y dirigido por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), ubicado en la provincia de Alicante. Pero antes queremos conocer un poco más a su autor....

José Figueres nació en Gandía, en 1981, si bien creció y vivió en Guardamar de la Safor, también en la provincia de Valencia, al que considera “su pueblo”. Antes de formarse y trabajar como integrador social, quiso recorrer un gran número de países del mundo y de escribir, en su pequeño cuaderno de campo, todo aquello que en los libros muchas veces no se encuentra.

Y así, de esta manera, nació su primer proyecto literario, "Desperté en la Habana", ganador del IV Premio Nacional Círculo Rojo de las Letras (Almería, 2018). Antes de este importante reconocimiento, recibió otros en la comarca de La Safor, escribiendo en su lengua natal, el valenciano. Es el caso del premio recibido en el I Certamen Literario de cuentos cortos de ASAEM Salud Mental, asociación valenciana de ayuda a enfermos mentales.

El origen de "La colla de Nelson" se remonta al año 2017, cuando ASAEM, en el marco de sus tareas de concienciación e integración social, se propone crear un proyecto denominado “Historias Efímeras”.

El proyecto se compone de distintas acciones, con el fin de prevenir problemas de salud mental y trabajar con la sociedad, para hacer ver, a través de esta sensibilización, que las personas con enfermedades mentales también son ciudadanos/as de pleno derecho.

De esta necesidad, nace el I Certamen Literario de ASAEM, teniendo como objetivo contar con un material propio, un cuento que trabaje la aceptación y respeto hacia la diversidad, por lo que se convoca un concurso de cuentos infantiles, con el compromiso de editar el cuento ganador y de utilizarlo como herramienta de sensibilización.

Este concurso literario se impulsa además para conmemorar el día de la Salud Mental, teniendo que abordar las obras que se presenten al mismo, aspectos relacionados con el respeto y la aceptación de la diversidad, con el fin de visibilizar con un nuevo material educativo entre los niños y niñas al colectivo de las personas con enfermedad mental.

Para gran alegría de nuestro compañero José Figueres y sus allegados, es su cuento "La colla de Nelson"  el que resultó ganador.
Para poder editarlo, ha sido fundamental la solidaridad de amigos/as, compañeros/as y personas sensibilizadas con la causa, utilizando para ello la plataforma de micromecenazgo Verkami. Una vez conseguida la cuantía económica necesaria, ha sido posible la edición de este cuento.

“Con este cuento, se pretende promover entre los más pequeños el respeto y la aceptación de la diversidad. Ya impreso y en nuestras manos, esperamos poder conseguir, empezando por los más pequeños, una sociedad futura más tolerante y respetuosa”, señala José Figueres.

La idea ha sido realizar una primera tirada de 500 ejemplares, cantidad mínima para poder tener el material físico y presentarlo a diferentes instituciones, interesadas en colaborar con nuevas ediciones, tanto en valenciano como en castellano, para que otras entidades puedan utilizarlo con el mismo objetivo.

“Si conseguimos más financiación, la destinaremos a ampliar el número de ejemplares a editar, con el objetivo de llegar a más personas y entidades que trabajan por la salud mental de las personas, pasando por colegios, familias, diferentes instituciones y asociaciones, etc.”, afirma nuestro compañero de la Fundación Salud y Comunidad.  Por ello, os pedimos vuestra colaboración.

Actualmente, se pueden encontrar materiales didácticos y terapéuticos para abordar el tema de la salud mental, “pero no había nada para los más pequeños, dirigido a niños y niñas de 3 a 7 años”, afirman desde la asociación valenciana ASAEM. De ahí el valor de este cuento, al que le deseamos muchos más éxitos, de la mano de su autor.

Sabemos también que la mente inquieta de José Figueres no para. Ahora está trabajando en la creación de su primer poemario, "Océano de sueños", también en valenciano.

Para ventas y más información sobre este cuento, os podéis dirigir a ASAEM: asaem.sm@gmail.com

Cabe señalar que el centro de acogida a menores “Verdader 2”, en el que trabaja nuestro compañero José Figueres como integrador social, cuenta con una capacidad máxima de 16 plazas. En este servicio se acoge a menores con características muy diversas en función de la edad que presenten (entre los 13 y los 17 años), de su momento evolutivo, y de los países de procedencia. Con estas premisas, se planifican las intervenciones que se llevan a cabo.

Para ello, se cuenta con las figuras profesionales que hacen posible esta labor con los menores acogidos (1 director, 1 psicólogo/a, 1 trabajador/a social, 14 educadores/as con titulación de diplomatura en educación social o grado en educación social u homologación, 3 técnicos/as de integración social y 1 intérprete en árabe y francés, entre otros perfiles).