En este servicio de la Fundación Salud y Comunidad (FSC), hemos vivido un confinamiento muy especial por la tipología del centro, derivado de la declaración del estado de alarma por la crisis sanitaria del COVID-19, que queremos compartir, a través de las acciones que se han realizado para prevenir posibles contagios. En el momento actual, para que la vuelta se realice con plenas garantías de seguridad y con los criterios establecidos, se han centrado todos nuestros esfuerzos en cumplir con rigurosidad las indicaciones de las autoridades sanitarias y de prevención de riesgos laborales, determinadas desde FSC.

Durante estos meses, hemos podido mantener el ritmo de tratamiento, adaptando las fases de evolución terapéutica de los usuarios/as a la situación de emergencia sanitaria provocada por la pandemia.

Se han llevado a cabo cambios a nivel de organización del equipo de intervención, alargándose los turnos horarios, y a su vez, se han espaciado los días de asistencia al centro, para minimizar el número de personas que entraban y salían, garantizando la seguridad de las personas usuarias. Con este fin, se han cumplido de forma estricta los protocolos determinados por las autoridades sanitarias, y por el Departamento de Riesgos Laborales de la Fundación Salud y Comunidad.

Igualmente, facilitamos el máximo de horas de confinamiento en su domicilio del equipo profesional del centro, con el fin de minimizar riesgos y garantizar su seguridad, poniendo asimismo los medios necesarios para evitar posibles contagios en el servicio.

Por otra parte, se realizaron la mayoría de dinámicas grupales en el exterior de la casa, haciendo uso de mascarillas, procediendo a la desinfección sistemática de espacios y objetos, y garantizando, en la medida de lo posible, la distancia de seguridad personal.

Además, el centro se cerró a proveedores externos, llevando a cabo la recepción de pedidos en el exterior de la casa, limitando el acceso a los despachos por parte de las personas usuarias, y no realizándose ingresos nuevos, hasta que el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia de la Generalitat de Cataluña lo autorizó.

Una vez pasados los momentos más restrictivos del estado de alarma por las medidas impuestas, se han llevado a cabo, si bien de forma progresiva, salidas de los usuarios/as del servicio durante el fin de semana y visitas de sus familiares, cumpliéndose siempre los protocolos de seguridad.

Según nos traslada el equipo profesional del centro, el confinamiento ha sido muy duro para todos los profesionales y también, para las personas usuarias del servicio, pero podemos decir, con gran satisfacción, que se han podido superar estos difíciles momentos sin ningún contagio, realizándose pruebas PCR al equipo profesional y a los usuarios/as, y pruebas serológicas al equipo.

Una vez se empezaron a dar las oportunas altas terapéuticas por finalización de tratamiento, una persona que acabó su estancia, músico de profesión, quiso hacer un regalo al centro, como muestra de agradecimiento, que queremos compartir.

Se trata de un vídeo musical que expresa muy bien el vínculo terapéutico que se forja con los tratamientos realizados en la Comunidad Terapéutica “Can Coll” de FSC, un vínculo que muchas veces va más allá de lo profesional, y que nos hace mejorar a todos/as como personas, ya que siempre se aprende de la convivencia.

Esperamos que os guste y lo disfrutéis tanto como nosotros/as.