Los Círculos de Apoyo y Responsabilidad se han extendido por toda Europa, y cada vez son más los países que se suman. El pasado año se cumplieron 30 años de la puesta en marcha de esta iniciativa, en una celebración en la que se reflexionó sobre los logros alcanzados y se trazó el camino hacia el futuro, destacando la importancia de trabajar con los perpetradores de delitos sexuales para prevenir la reincidencia y construir comunidades más seguras. El periódico El País, en su edición impresa de Cataluña, ha publicado la información titulada “La compleja reinserción de los agresores sexuales”, en la que se explican las características de este proyecto y su implantación con éxito en España.

En la misma, se señala “¿qué ocurre cuando uno de ellos vuelve a salir a la calle tras haber cumplido condena? ¿Qué puede ayudar a que no haya más víctimas y por lo tanto a que se rehabilite y no vuelva a reincidir? En 2022 se implantó en España un programa llamado Círculos de Apoyo y Responsabilidad. Na­cido en Canadá en 1994, se ha extendido a 10 países europeos. Está orientado a la gestión del riesgo para delincuentes sexuales que no están cumpliendo ya condena en prisión, pero que aún presentan un riesgo moderado o alto de re­incidencia. No todos los agresores sexuales cumplen las condiciones para acceder al programa, hay una evaluación exhaustiva previa de los técnicos para identifi­car aquellos que puedan tener un aprovechamiento real”.

Círculos España es un proyecto de prevención gestionado por la Fundación Salud y Comunidad (FSC), supervisado por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias. El programa ofrece un marco de apoyo y supervisión a personas que han cometido delitos sexuales, considerados “perfiles de alto riesgo”.

La iniciativa está subvencionada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del IRPF, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio del Interior. Asimismo, cuenta con una gran participación de voluntariado que disponen de espacios de apoyo y supervisión continuos, así como de jornadas de formación específicas.

Siguiendo con la noticia publicada por El País, también se incide en que “son perfi­les que cumplen penas por delitos de naturaleza sexual, que han pa­sado la mayor parte de su conde­na en 2º grado (en el centro peni­tenciario), que en el propio centro han seguido el programa de inter­vención para delitos de agresión sexual con un buen desarrollo del mismo, y que requieren una fase de acompañamiento en comuni­dad y de supervisión en el tránsito hacia la vida en libertad”.

La información también incluye declaraciones de Laura Negredo, subdirectora general adjunta de Medio Abierto y Penas y Medidas Alternativas y vocal de la Junta Directiva de Círculos Europa que añade que «es fundamental que las perso­nas que participan en él quieran el cambio, quieran continuar con el cambio que empezaron en la cárcel y se comprometan a ello».

Asimismo, Laura Negredo afirma que “es un programa dirigido a internos con necesidades de apoyo a los que se identifica que están más aislados socialmente”, de modo que “lo que buscamos crear es una red de apoyo social para mitigar ese riesgo. Círculos ha demostrado su eficacia en otros países, es una necesidad social y penitenciaria».