Desde la Federación de Entidades Valencianas en Adicciones (FEVeA) denuncian que la Generalitat haya decidido reducir sus presupuestos destinados a la atención y reinserción social de las personas con problemas de drogas en la Comunitat Valenciana. La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública recortará estos fondos un 15%, como ocurrió también el año pasado. Pasará de destinar 1.050.000 euros a 900.000.

Tras un duro año de trabajo condicionado por los recortes y por el impago de las subvenciones, se prevé que para 2016 la Generalitat reduzca sus presupuestos destinados a la atención y reinserción social de las personas con problemas de drogas en la Comunidad Valenciana. Una situación que limita considerablemente las posibilidades de acción terapéutica de las siete entidades agrupadas en la FEVeA, Federación de Entidades para la Atención de las Adicciones en la Comunidad Valenciana.

Según los datos oficiales señalados en los presupuestos de la Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública para el 2016, publicados el pasado jueves 5 de noviembre, los fondos destinados se reducirán otro 15%, unido al 15% minimizado el año 2015, una reducción que no contempla las planteadas también en los conciertos y licitaciones.Esto supone menos recursos para las entidades de atención a las drogodependencias, que implicará consecuencias directas en los servicios de atención prestados, así como en el número de plazas disponibles en los centros de deshabituación, que ofrecen una segunda oportunidad a personas con problemas de conductas adictivas y que, en bastantes ocasiones, padecen enfermedades asociadas a la drogodependencia.

La reducción consecutiva de presupuesto ubica a las entidades de la federación en un estado crítico, ya que a estos recortes se debe sumar el hecho de no haber recibido ningún ingreso por parte de la Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública, a pesar de seguir desarrollando sus atenciones y de haber justificado por adelantado el 60% de la subvención resuelta para este 2015. Este panorama invita a cuestionar si en 2016 se podrá atender a todas las personas que necesitan los servicios básicos de los diferentes centros y programas, como por ejemplo, el apoyo psicológico y social a personas y familias afectadas por la problemática de las adicciones, los comedores sociales para los afectados en una situación de mayor exclusión social o la cobertura sanitaria de proximidad a personas que están fuera de los servicios sanitarios comunitarios.

Según Jorge Fernández, presidente de FEVeA: “Estos recortes se han publicado sin darnos ninguna explicación a las entidades que, desde los años 80, llevamos atendiendo la problemática de las drogas en la Comunidad Valenciana. No entendemos esta política, sobre todo, cuando hace quince días se planteaba en la Sesión Especial de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre Drogas, que el 2016 será un año en que la reducción de daños adquirirá un mayor papel en los enfoques nacionales e internacionales frente al consumo de drogas”.

En opinión de Luis J., valenciano de 32 años y antiguo usuario de un programa de reducción de daños y de una unidad de deshabituación: “Mi familia y yo le debemos mucho a la gente que nos atendió hace dos años cuando estaba enganchado a la cocaína. Estaba en paro, tenía problemas familiares y cuando me di cuenta me había quedado solo y estaba en la calle buscándome la vida. Cuándo empecé a pensar que algo debía cambiar, ya me estaban atendiendo en un centro de reducción de daños. Gracias a ellos pude pasar a un programa de deshabituación donde terminé de desengancharme. Ahora estoy en seguimiento, he retomado el contacto con mis familiares y hasta he conseguido un contrato en prácticas en un taller mecánico“.

En esta línea, Jorge Fernández concluye: “Habría que dar más prioridad a la salud y bienestar de las personas usuarias de drogas, tal y como se desprende de las informaciones difundidas por los organismos internacionales de referencia para la atención de las drogodependencias, como la noticia publicada por AIDSMAP el 27 de octubre. Esta falta de participación por parte de las instituciones valencianas no nos hace sentir bien y esperamos que desde la Conselleria se nos atienda”.