La Fundación Salud y Comunidad, desde su programa del Centro de Intervención de Baja Exigencia (CIBE) de Valencia, dispositivo de reducción de daños para drogodependientes, ha impartido del 1 de octubre al 17 de diciembre un total de 20 talleres sobre prevención de conductas adictivas, adaptados a las necesidades de las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo. La formación se ha realizado en diversas entidades que integran la Federación de Asociaciones en favor de las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo de la Comunidad Valenciana (FEAPS CV).

FEAPS CV, como movimiento asociativo en defensa de los derechos de las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo, ha puesto en marcha este año un nuevo proyecto, con el objetivo de evitar la exclusión social de las personas con discapacidad intelectual.

En el marco de este programa, se abrió a las entidades de la federación el “Proyecto SINERGIAS”. Desde él se pretende apoyar las acciones que relacionan exclusión social y discapacidad intelectual, iniciando con ello la puesta en marcha de dos talleres sobre diversidad sexual y sobre adicciones, contando para ello con la colaboración de profesionales de Col·lectiu Lambda (asociación privada sin ánimo de lucro, que denuncia la discriminación legal y marginación social hacia lesbianas, gays, transexuales y bisexuales), que trabajaron conjuntamente con profesionales de la Fundación Salud y Comunidad.

Durante este periodo, se han beneficiado de estos talleres casi 300 personas con discapacidad intelectual de una veintena de entidades, de las tres provincias de la Comunidad Valenciana.

Las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo también están expuestas al consumo de sustancias adictivas y a patrones comportamentales problemáticos. Los motivos que les llevan a iniciarse en la práctica de conductas adictivas son los mismos que los de las personas que no tienen discapacidades.

No obstante, este colectivo es especialmente vulnerable ya que en él confluyen algunos factores de riesgo que, sin ser diferentes a los que presentan el resto de la población, en ellos se manifiestan de una manera más acentuada.

Las personas con necesidades educativas especiales, cada vez más, están logrando una vida independiente y autónoma; para que esto se produzca de forma plena necesitan del aprendizaje de estrategias que les permitan enfrentarse de manera eficaz a los riesgos existentes en el entorno social en el que residen, entre los que se encuentra el consumo de drogas y el desarrollo de posibles patrones conductuales desadaptativos, siendo el primer paso hacia la prevención, el acceso a una información adaptada a sus capacidades.

Las limitaciones cognitivas y la vulnerabilidad emocional son características descriptivas de este colectivo de personas. Estos dos factores de riesgo son determinantes en el desarrollo de las adicciones: la necesidad de integración social y de pertenencia a un grupo, la baja confianza en ellos mismos, la dependencia de los demás o escasas habilidades sociales, junto con la falta de autocontrol, pueden ser facilitadores de los primeros contactos con las sustancias. Si a esto se une la ausencia de un entorno sociofamiliar favorable que pueda detectar y frenar estos primeros escarceos, los riesgos de desarrollar un consumo problemático de drogas se multiplican de manera exponencial, dejando al individuo totalmente desprotegido.

Por estos motivos, el Programa de Exclusión Social de FEAPS CV propuso a las entidades que forman parte de la misma la realización de un taller formativo sobre conceptos básicos en adicciones, como un espacio de encuentro y de participación de las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo en torno a las conductas adictivas. Para ello, contó con mi colaboración como psicóloga del CIBE de FSC en Valencia, dada mi trayectoria en el tratamiento de las adicciones. La experiencia ha sido muy enriquecedora, para todos los que en ella han participado.

Las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo (PCDID) no se han considerado como un colectivo de acción preferente en materia de prevención de adicciones. Con esta experiencia, hemos podido comprobar cómo el logro de una mayor autonomía en estas personas, normaliza también los riesgos a los que se exponen.

Destacamos:

  • El interés que, sobre todo el colectivo más joven, presenta hacia las estrategias de reducción de daños y riesgos en el consumo de alcohol.
  • El uso de tabaco, alcohol, el juego patológico, las ingestas de comida compulsiva son los patrones conductuales que más nos encontramos.
  • La existencia de problemática alcohólica en familiares de los participantes.
  • Los elevados conocimientos que sobre adicciones poseen las PCDID, sin ser uno de los temas que desde las entidades se aborde.

Tanto para FEAPS CV como para FSC, esta experiencia ha supuesto el inicio de futuras colaboraciones más específicas y concretas, que esperemos proporcionen continuidad al tratamiento de las problemáticas relacionadas con las adicciones en las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo, sus educadores y familias.

FEAPS CV es una organización no gubernamental, sin ánimo de lucro, además de la entidad más representativa del sector en la comunidad autónoma. La constituyen un total de 50 asociaciones, más de 8.000 socios y 6.000 usuarios, 120 servicios de atención directa y casi 1.500 profesionales.

Es, además, una de las 19 que existen en todo el territorio nacional y que conforman el Movimiento Asociativo FEAPS, representado por la Confederación Española de Organizaciones en favor de las personas con discapacidad intelectual.

Encarna Muñoz Puig
Psicóloga del CIBE de Valencia