La subdirectora del Área de Atención a la Dependencia de FSC ha sido entrevistada recientemente por la revista especializada en información económico-sectorial SANImarket. En esta entrevista se abordan cuestiones como las referentes a la oferta asistencial que FSC destina a los usuarios/as con Alzheimer, los programas desarrollados por nuestra entidad para mejorar las capacidades físicas y cognitivas-conductuales de éstos, el papel que desempeñan las entidades sin ánimo de lucro en la atención a este perfil de usuarios/as, etc.

En esta entrevista Carme Trilla afirma que en los centros de día, residencias y servicios de atención domiciliaria es donde FSC atiende al mayor número de usuarios/as con Alzheimer o con algún otro tipo de demencia. En concreto, en estos recursos el número de usuarios/as con demencia representa más del 80% de las plazas ocupadas y, de ellos, el 60% tiene diagnosticada una demencia como el Alzheimer.

Entre otras cuestiones, también explica que FSC desarrolla varios programas específicos dirigidos a estos usuarios/as como talleres de memoria y psicomotricidad mediante la consola Nintendo Wii; terapia de animales, talleres de musicoterapia; aromaterapia… Todos ellos con el fin de estimular la pérdida de las funciones intelectuales, que suele generar el Alzheimer.

Esta enfermedad actualmente afecta a más de 35 millones de personas en todo el mundo, una cifra que se triplicará para el 2050, fecha en la que se prevé que habrá 115 millones de personas afectadas directamente. En España la incidencia de la enfermedad ya supera los 800.000 casos.

El Alzheimer es una enfermedad degenerativa de las células cerebrales –las neuronas-, de carácter progresivo y de origen hoy todavía desconocido, que empieza a ser un problema socio-sanitario de primera magnitud con incidencia en todos los órdenes de la sociedad. La dependencia que genera afecta no sólo a la persona que sufre directamente la enfermedad sino también a la familia cuidadora. Supone además una carga económica muy grande a particulares y al propio Estado.

Con motivo del Día Mundial del Alzheimer,  la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (CEAFA) decidió promocionar este día tan importante con el lema “Alzheimer. Cuestión de Estado”. Todos los actos que se organizaron tenían un doble objetivo. Por un lado, sensibilizar a la sociedad española acerca de esta “epidemia del siglo XXI”, así como sus consecuencias socio-sanitarias; y por otro lado, desarrollar una campaña de educación sanitaria dirigida a promover la prevención de esta patología, entre quienes la padecen directamente y sus familiares cuidadores.

Según la confederación, se requiere una acción global y coordinada que integre a todos los actores vinculados para poder hacer frente a esta realidad. Cierto es que el actual Sistema Nacional de Salud articula medidas encaminadas al tratamiento de quienes la sufren, y que las políticas de bienestar están también al alcance de las personas afectadas, pero ambos escenarios contemplan la  enfermedad de Alzheimer y el resto de demencias como “una enfermedad más”, sin calibrar el peso específico o el impacto socio-sanitario que van a generar a medio plazo.

De hecho, España no dispone todavía de un Plan Nacional de Alzheimer que oriente la acción coordinada y conjunta para hacer de esta enfermedad una prioridad socio-sanitaria. Tanto desde la iniciativa privada como desde el Tercer Sector o desde la propia CEAFA, se insiste en la necesidad de una detección precoz de la patología y en la reclamación de un Plan Nacional de Demencia semejante al que ya existe en otros países como Reino Unido, Australia, Dinamarca, Finlandia, Francia, Corea del Sur, Estados Unidos, Noruega y Países Bajos.