Ana Vela Rubio, nacida el 30 de octubre de 1901 en Puente Genil (Córdoba), ha pasado a ser desde el pasado 6 de junio la persona más longeva de la historia de España. Es usuaria de la Residencia, Centro de Día y Hogar “La Verneda” de Barcelona, centro de la Generalitat de Cataluña, gestionado por la Fundación Salud y Comunidad en consorcio con el Grupo Lagunduz. Para conocer mejor su día a día y otros detalles de cómo transcurre su vida en el centro, hemos entrevistado a David González y a Mª Rosa Martín, director y coordinadora del Área Psicosocial de este servicio.

Cuidando de Ana, la persona más longeva de la historia de España
“Ana Vela siempre ha sido especial para nosotros por su carácter afable, cordialidad en el trato y fortaleza personal”

¿Qué significa para “La Verneda” que la persona más mayor de España, con 114 años y 222 días en estos momentos, resida en este centro?

Ana es una más. La atención que le damos es la misma que ofrecemos al resto de personas residentes acogidas en los dos recursos, el residencial y el de estancia diurna. Es un hecho anecdótico que sea la más mayor de España y una de las más longevas de Europa (segunda) y del mundo (novena). Si es cierto que siempre ha sido para nosotros una persona especial por su carácter afable, por su cordialidad en el trato y por la fortaleza que nos transmite su personalidad.

Estos últimos días en los que se ha producido la noticia, habrán sido muy intensos a nivel mediático

Sí, nos han llegado muchas solicitudes de medios que quieren entrevistarla, queremos aprovechar para decir a otros que puedan estar interesados que no es posible hacerlo dado su estado avanzado de deterioro cognitivo, además de que no queremos que la noticia altere la tranquilidad a la que está habituada en el centro. Tampoco la familia está acostumbrada a los focos mediáticos por lo que, de momento, no se van a hacer declaraciones.

¿Cómo es el día a día de Ana Vela?, ¿a qué dedica su tiempo?

Su día a día está basado en las rutinas de cuidados del centro. A pesar de tener momentos en que conoce a las personas de su entorno más cercano, su memoria está severamente alterada. Se levanta sobre las 8 de la mañana y, después del desayuno, permanece en la sala común de la planta donde está su habitación en la residencia, junto a sus compañeros de planta. Allí recibe visitas y, en algunas ocasiones, participa en aquellas actividades de estimulación sensorial que puede realizar todavía. También, se hace un trabajo de fisioterapia con ella para mantener su estado físico actual, ya que al ir en silla de ruedas, su musculatura se debilita. Después de comer, se la acuesta para que descanse y la tarde suele ser más tranquila.

¿Cuánto tiempo lleva ingresada en su centro y cómo ha sido su evolución?

La Residencia, Centro de Día y Hogar “La Verneda” acogió a Ana primero en el servicio de estancia diurna cuando contaba con 103 años (en 2005). En ese momento, era una persona lúcida, orientada y caminaba solo con ayuda de un bastón. Leía el diario todos los días y se mantenía activa participando en las diferentes actividades psicoestimulativas y de fisioterapia que organiza el centro.

Al ser su hija también mayor y no poderse hacer cargo de su cuidado, tuvo que ser ingresada en otro recurso residencial a la espera de tener plaza en nuestro centro. Finalmente, regresó a esta residencia en 2008, cuando tenía 106 años (por tanto, hace más de 11 años que la conocemos) y se mantuvo activa durante mucho tiempo. Poco a poco, su estado ha ido cambiando, especialmente notable ha sido la pérdida de memoria y de funciones físicas.

¿Cómo es su estado de salud actual?

Ana cuenta con una salud óptima para su edad, pese a tener una artrosis generalizada. Es una mujer fuerte. En 2010, cuando tenía 109 años, sufrió una rotura de fémur que la obligó a permanecer en silla de ruedas y, hasta ese momento, mantenía la escritura y leía un poco, ya algo menos, debido a que su memoria ya empezaba a acusar el paso del tiempo, que en su caso era aún más evidente.

¿Qué cosas le gustaba hacer en el centro cuando se encontraba mejor de
salud que ahora ya no hace?

Cuando la conocimos, leía el periódico todos los días, también revistas y se mantenía en contacto con la realidad social de su entorno. Ha tenido siempre un carácter muy sociable y ha sabido ganarse el afecto y respeto de las personas cercanas.

¿Se relaciona de algún modo con otras personas?

Sí, pero muy escasamente, ya que su estado cognitivo actual no le permite mantener una relación activa. Especialmente, mantiene contacto con el personal de atención directa del centro y con su hija, que la visita a diario.

Más información:

http://politica.elpais.com/politica/2016/05/24/actualidad/1464108032_685941.html
http://cat.elpais.com/cat/2016/05/24/catalunya/1464108032_685941.html